¡Reserva el boleto para visitar el
David y los prisioneros (i prigioni ) de Miguel Ángel!
Miguel nació en Caprese (provincia de
Arezzo) el 6 de marzo de 1475 donde se encontraba la familia por motivos de trabajo del
padre Ludovico Bonarroti como
magistrado. Solamente pocos meses después de su nacimiento, la familia regreso
a Settignano sobre las colinas florentinas.
En
el 1488 Miguel Ángel (aunque si el padre
era en contra) entro como aprendiz en la bodega de los hermanos Ghirlandaio
pero donde se quedo solo un año porque
luego de la sugerencia de Francisco Granacci inicio a frecuentar el
Jardín de la casa de los Medici en San Marco.
Gracias a la frecuentación de la Academia
Artística (subvencionada propio por
Lorenzo el Magnifico) tuvo modo de conocer Marcilio Ficino), Poliziano e Pico
de la Mirandola además de algunos de sus comitentes como Piero, Giuliano, papa
Leone X y Clemente VII.
En el 1496 dejo Florencia para ir a
trabajar a Roma en la obra encargada por
el cardinal Jean Bilheres. La piedad representa la primera obra
maestra realizada en mármol de carrara.
El 16 de agosto de 1501 la Opera del Duomo
de Florencia encargo a Miguel Ángel la realización de la estatua del David que debería
haber sido colocada en la Plaza del Duomo.
El bloque de mármol asignado a Miguel Ángel
había sido ya usada en parte por Agustino Duccio que a pesar de las dificultades
al inicio logro completar la obra en tres años.
Para los florentinos el David se convirtió
en el símbolo de la ciudad que una comisión
formada por los mejores artistas del periodo entre los cuales Filippino Lippi,
Sandro Botticelli, Simone del Pollaiolo y Leonardo da Vinci decidieron de
colocar la estatua en la Plaza de la Señoría.
Con el fin de tutelar la estatua del mal
tiempo en el 1873 fue llevada en el interior de la Galería de la Academia donde
al inicio del siglo pasado (1909) fue alcanzada por los cuatro prisioneros (en italiano i prigioni)
del artista.
Miguel Ángel inicio a trabajar a los prisioneros (i prigioni)
en el periodo en el cual era ocupado a la Sacristía Nueva de San Lorenzo.
Inicialmente debían ser 40, luego veintidós
y al final los De la Rovere pidieron solo 6 esculturas. Dos de esos (los únicos
terminados) se encuentran ahora en el museo de Louvre. La función de ellos era
la de mover la arquitectura del monumental sepulcral donando un censo
tridimensional de todos juntos.
Las cuatro esculturas incompletas,
denominadas Esclavo joven (en italiano Schiavo
Giovane), Esclavo Barbudo (en italiano Schiavo Barbuto), Atlante e Esclavo que
se despierta (en italiano Schiavo che si desta), permiten de profundizar la técnica escultural de Miguel Ángel, que
inicialmente encaminaba el bloque tirando afuera la vista principal y luego
contemplaba el resto cincelando el material que lo rodeaba.
La
atención de Miguel Ángel en modelar los prisioneros (i prigioni) e volteada del
lado del torso, dilatado y contraído, en movimiento y en tensione mientras los
lineamientos de la cara quedan indistintos hasta el final.
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